Marcos Rojo puso en ventaja a la Albiceleste muy temprano (m.14) y Pastore amplió a los 27 pero, sin duda, el punto de inflexión estuvo en apenas seis minutos, los mismos que necesitó Di María para señalar el camino de la goleada a los 47 y 53. Paraguay fue rival hasta el final del primer tiempo, cuando Lucas Barrios dejó el parcial en 2-1. Messi fue asistente en tres tantos y con esta presentación monumental Argentina llegará el sábado a Santiago en busca de dos propósitos: alcanzar con 15 títulos a Uruguay, el líder del palmarés en la historia del torneo, y acabar con una sequía de 22 años sin dar la vuelta olímpica.
Javier Mascherano, Agüero y Messi, en riesgo de suspensión, hoy no vieron amarilla y podrán estar en la final. A pesar de la clara superioridad, Argentina llegó a sentir inicialmente dificultades para desplegar su juego hasta que se abrió el camino a balón parado. Una falta sobre Di María la botó Messi y el lateral zurdo Rojo aprovechó que ni Víctor ‘Topo’ Cáceres ni Pablo Aguilar cerraron bien y sumó de un zurdazo en el área pequeña.
Después de avisar en un remate a centro de Pablo Zabaleta, Pastore concretó en el minuto 27 a pase de Messi. En el mismo minuto del gol, Paraguay perdió a su principal talento, Derlis González, lesionado tras un choque con Di María. A Derlis, el artífice del triunfo en cuartos contra Brasil, le siguió la baja de Roque Santa Cruz. Por ellos, ingresaron dos argentinos nacionalizados: Raúl Bobadilla y Lucas Barrios. Con el 2-0 de ventaja, Messi entró más en acción y merodeó el área rival buscando el tercero en dos faltas botadas demasiado alto Barrios recortó distancias con un remate de pierna izquierda.